Reseña

La sociedad paraguaya es exigente con los liberales. Nos pide mil virtudes. A los colorados ya no les exige nada, ya son conocidos. Tampoco los colorados tienen ganas de cambiar. Para sus hijos es normal lo ilegal. Entonces, tendremos corrupción para rato si los liberales no cambian totalmente el sentido que hay que imprimir a la actividad política. Pero pareciera ser que con los actuales políticos liberales, no vamos a conseguir que cambien, que sean serios, patriotas, sensibles a las necesidades de las mayorías, que dejen de improvisar, de bastardear sobre la forma de hacer política. Incluso la territorialidad, los recursos naturales y la identidad nacional están en peligro. Esas realidades no pueden ser consideradas por personas que solo ven en la política únicamente su redención.