Cero veintidós
Ciencia Ficción
La ciencia ficción supone un tipo de creación literaria que se desarrolla en un contexto imaginativo, tanto temporal como espacial; el género se aproxima a indagar en forma especulati-va posibles contextos en el que se ponen en ejecución avances científicos y conflictos calamitosos, al punto que se ven ame-nazados los patrones de funcionamiento del sistema mundial.
La habilidad imaginativa del autor concibe escenarios futu-ristas y alternativos, los cuales incitan al lector a reflexionar sobre las posibles consecuencias que tendría la ciencia y la transhumanización. Su puesta en marcha sospecha la amenaza de la tecnología revelándola en su lado más oscuro y despiadado. Este fenómeno podría desencadenar la superación de las limitaciones humanas, y el surgimiento de una refinada tiranía en la que la inteligencia artificial dominaría al hombre.
Junto a estos leitmotivs se suma el de la posible fragmen-tación de la biología humana y los cambios que implicaría para nuestro planeta el surgimiento de anomalías en la genética y su biodiversidad.
Cero Veintidós forma parte de la serie narrativa Crónicas de mi Sangre que nos entrega el autor José A. Monnin. El volumen nos introduce al fascinante mundo de la ciencia ficción. Su originalidad, así como los efectos que logra en cada relato, nos conmocionan al punto de resquebrajar la pasividad de nuestra lógica habituada al relato clásico. La narrativa se nutre insaciablemente de pistas enigmáticas, giros inesperados y un preponderante manejo de la tensión emocional.
En el cuento El paciente, por ejemplo, el personaje movili-za sutilmente el misterio en torno a su condición patológica, ya que se soslaya la sospecha de que estaría contagiado de una enfermedad epidémica que asolaría a toda la población hasta extinguirla. El elemento clave del relato se manifiesta con la continua sensación de intriga ante posibles siniestros. La per-plejidad es tal, al punto que aguardamos gradualmente la con-sumación de los mismos. Sin embargo, el desenlace es abier-to, y el autor deja al lector su reconstrucción en sus circunstancias ambivalentes.
En los cuentos Covid-digital, Alelados, y Renacer estos mismos elementos vuelven a hacerse latentes, ya que surge un dilema frente a la posibilidad de que una enfermedad pandé-mica se extienda no solo en el ambiente exterior, sino también en el universo digital. Los cambios inesperados alteran el curso de la historia con revelaciones impactantes sobre los fenóme-nos que aparecen.
Los personajes principales son redondos, sus personalida-des se tornan contradictorias haciendo que el lector se sienta desconcertado ante los hechos del entorno. El mayor obstácu-lo es comprender la crisis, la distopía subyacente en cada ac-ción que involucra el peligro de nuestra caída como raza, o quizás su posterior renacimiento.
Un tema novedoso es la aparición de máquinas y softwares de inteligencia artificial, cuya aplicación se adecua a variados campos; es el caso del cuento Cardio-cámara en el que un instrumento posee una cualidad especial capaz de detectar lo que el corazón padece. Esta máquina muestra un tipo de ingeniería enfocada en la investigación de la anatomía humana.
Por otra parte, en Setenta páginas se aprecia una inteli-gencia artificial que puede continuar escribiendo la novela de un escritor fallecido, dándole desenlace para que no quede inconclusa; esta capacidad estaría acorde con lo que el autor hubiera pensado si siguiese con vida. Por último, en Textos cobra protagonismo un vehículo de transporte interdimensio-nal, competente para cambiar el destino de los hechos y la consecución del presente.
Cabe resaltar que en los cuentos Cero veintidós, Drui y En la entrada se aguza otra arista estilística del género que es la posibilidad de la vida extraterrestre. Se trata de seres que existen más allá de la Tierra y que pudieran intervenir en nuestro plano físico. Los relatos juegan con la especulación y abren el debate ante la posibilidad de estas formas de vida, cuya fisiología e intenciones desconocemos.
En la misma tesitura, los personajes de Kepleriano son navegantes del espacio exterior, su nave espacial posibilita el acortamiento de las distancias y el conocimiento de otras consciencias en latitudes inciertas del cosmos.
Estos relatos son solo una pequeña muestra de la riqueza que goza el género en sus múltiples alegorías. La encantadora colección de Cero Veintidós inspira ideas sobre el mundo que se adviene. Conjetura lúcidamente hipótesis sobre las condi-ciones que vivenciaríamos en un futuro próximo.
El autor nos da la libertad de inquirir en la urdimbre narra-tiva. Su intensa línea hipotética nos lleva a observar nuestra conducta y a prepararnos para esos tiempos, cuyos modelos existenciales serán distintos.
Esa es la singularidad que agita críticamente su mensaje, a la par que nos entretiene con sus juegos imaginativos, disto-pías y paradojas.
Mgtr. Daily Grace
Magíster en Lengua y Literatura Hispanoamericana.
Metodóloga en Investigación Literaria.
Escritora y editora de textos.