Reseña

Sus fuentes de inspiración son el apego al terruño que lo vio nacer, y su grito de piedad para proteger la naturaleza, a sus cristalinos cauces hídricos, a sus fuentes generosas, a los juncos siempre citados, a la verde floresta, a la fértil tierra, como un llamado de auxilio ante el atropello y destrucción de la madre naturaleza. Canta al hermano sol como fuente universal, gratuita e inagotable de energía, a la luna, a las estrellas, como inspiradoras, pícaras y románticas. Cuando las emociones se agolpan a borbotones en la mente de Pablo, lo plasma en palabras, en las primeras hojas que tiene a mano, para describir todo aquello a que él llama, y lo expresa con maestría en cada momento.