Reseña

Esta investigación revela la situación crítica que enfrentan las juventudes campesinas en Paraguay: en el sector rural, la presencia juvenil se reduce dramáticamente, lo que refleja el envejecimiento del campo paraguayo y una severa crisis en la continuidad de la agricultura campesina. A través de un estudio en cuatro departamentos con distintos niveles de desarrollo del capitalismo agrario, la obra explora los efectos del modelo de desarrollo dominante sobre el arraigo territorial, la emigración y las transformaciones identitarias, así como las estrategias que despliegan los jóvenes para construir sus proyectos de vida en contextos adversos. El libro identifica experiencias exitosas de retención juvenil y propone algunos lineamientos para pensar políticas públicas que podrían revertir el éxodo rural, garantizando tanto la soberanía alimentaria y territorial nacional como condiciones dignas para que las nuevas generaciones puedan elegir permanecer en sus comunidades, y que la migración no sea forzada, sino un derecho. Una lectura para pensar las transformaciones del mundo rural contemporáneo y los desafíos presentes y futuros del país.