Justicia, tierra y libertad. Marina Kué, 10 años después
La masacre de Marina kue superó todos los límites de
la represión a las organizaciones campesinas conocidos
hasta entonces. Montada sobre el horror de la matanza,
la élite económica latifundista articuló procesos
sediciosos y antidemocráticos en curso que llevaron al
quiebre del orden constitucional. La continua expulsión
del campesinado de sus territorios, acaparados por el
agronegocio, fue el telón de fondo de la tragedia.
Diez años después, las deudas con todas las víctimas
siguen pendientes.
El Estado tuvo todo ese tiempo para esclarecer lo ocurrido.
Lejos de esa intención, se dedicó a destruir evidencia, amedrentar testigos, perseguir jueces y constituir pruebas ilegales para mantener una versión insostenible.
Más que nunca, se justifican las demandas de
verdad, justicia y reparación, mediante una comisión
independiente de investigación para esclarecer lo que
pasó en Curuguaty y la regularización definitiva de la
tierra, garantizando el derecho a la participación del
campesinado.