Reseña

Este libro, su primera obra publicada, reúne un conjunto de cuentos escritos con ternura, profundidad y una mirada esperanzada sobre la vida. Historias que nacen de su experiencia vital, de sus vivencias como madre, abuela, docente y psicóloga. En estas páginas se entrelazan la infancia, los afectos, la naturaleza y los pequeños grandes valores cotidianos que muchas veces el mundo moderno parece olvidar. Cada relato es una invitación a detenerse, a mirar con amor lo sencillo, a rescatar lo esencial y a valorar lo verdaderamente importante: la familia, la amistad, la fe, y la capacidad de volver a empezar siempre.
En estas páginas habitan historias tejidas con la delicadeza de lo cotidiano y la profundidad de lo esencial. Cuentos que nacen de la memoria, de los afectos sencillos, de la vida compartida en familia o en comunidad. Pero también relatos que se adentran en el misterio, en los silencios, en aquello que no siempre tiene explicación pero que permanece en el alma de quien lo ha vivido.
La autora nos invita a recorrer un universo de personajes entrañables, escenarios rurales y urbanos, tradiciones, recuerdos y vivencias que dialogan con nuestras propias historias. Entre la ternura y la nostalgia, entre la realidad y lo simbólico, sus cuentos nos conducen a una lectura que emociona, sorprende y deja huella.
Un libro para todos aquellos que valoran las historias bien contadas; para quienes saben que en la sencillez se esconde lo extraordinario, y que en cada experiencia —por cotidiana o misteriosa que parezca— late siempre una enseñanza para el corazón.